Y... ¿Porqué no nos preguntaron?

Esta vez no me voy a quejar, esta vez voy a expresar un gran miedo que me aqueja, me da miedo el rumbo que lleva este país, no, me da miedo el rumbo al que Felipe Calderón está llevando a este país.

México es un gran país, pero en estos momentos el gobierno federal no solo lo tiene reducido en capacidades, realmente está haciendo un títere del pueblo, poco a poco gana control de él mediante ataques mediáticos, vaya que lo que hace es infundir el miedo de todos y contra todo para lograr así un país 100% subyugado (antes sólo era el 90%).

Día a día leemos en los periódicos, vemos y escuchamos en los noticieros como la violencia en este país parece no tener fin, hay decomisos de grandes cantidades de drogas, balaceras entre narcos y policías, entre policías y ex-policías, entre militares y policías, bandas de secuestradores que encarcelan, vaya, que supuestamente le están dando con todo al crimen y a la ciudadanía.

Antes la gente tenía cierto recelo de salir a las calles y no es para menos, en cualquier momento a un hijo de puta cualquiera se le ocurre asaltarte o robarte el carro o secuestrarte o hasta asesinarte por el puro gusto de sus bolas, pero ahora la situación es insostenible y ciertos personajes privilegiados han podido alzar la voz y quejarse con resquemor del gobierno y su prácticamente nula capacidad para salvaguardar nuestra seguridad e integridad física, emocional y monetaria.

Casos muy sonados como el de Martí o el de Várgas nos causan un gran impacto, porque ellos sí tuvieron los recursos para hacerlo público, tuvieron la suficiente ingerencia para movilizar a miles de personas en una marcha y pusieron a las autoridades en la "mira" de la sociedad, no quiero en ningún momento menospreciar ni mucho menos minimizar el dolor que estas personas sienten, pero no son los únicos, miles de personas sufren casos similares e inclusive más atroces, pero no todos tienen el poder de hacer marchas y de exigir públicamente justicia en los noticieros y en los diarios.

La situación es insostenible, no hay que ser un genio para saberlo, pero lo que no es posible es como el gobierno federal se valga de estos hechos tan lamentables para llevar poco a poco a este país al fascismo total.

Escudados en una supuesta "mayor seguridad", el gobierno de Felipe Calderón busca obtener el control total de los habitantes de este país, primero tienes obligatoriamente que registrar tu celular, para luchar contra eso de las extorsiones telefónicas y para combatir el secuestro (como si el secuestrador lo vaya a hacer, sin mencionar que hablan del teléfono de sus víctimas). Registras tu celular, con tu nombre, y así pueden saber con quién hablas, cuánto tiempo hablas y lo mejor: que hablas y si no estás de acuerdo, tan fácil, te quitan tu número.

Ahora a Felipe se le ocurrió una mejor: "La Cédula de Identidad Ciudadana", esta cédula posee toda tu información, tu fecha y lugar de nacimiento, tu curp, tu huella digital, tu fotografía y hasta la huella del iris de tu ojo, vaya, que la dichosa cédula sirve para tener un control aplastante sobre la población y no sólo es para los ciudadanos, hasta los niños mexicanos deben de poseer la Cédula de Identificación Personal, ¿qué pasará si alguien de los 107 millones de mexicanos no la tiene? ¿Habrán multas acaso? ¿Sanciones jurídicas? No somos perros para tener un "chip" identificador, ¿dónde quedó nuestro derecho a la privacidad?

El costo de este instrumento de control es superior a los 3 000 millones de pesos, ¿cuántos programas sociales se verían beneficiados con esta cantidad de dinero? en vez de buscar herramientas de opresión, debería el gobierno federal invertir ese dinero en amortiguar el embate de la crisis económica que existe en el país o utilizar ese recurso en programas educativos (claro, no para Elba Esther) y de cultura, eso es lo que le falta al país, no un método fascista de apabullante coartación de la privacidad.

One Love!